Números de primera, presente de segunda

El año que tuvo la primera división de Estrella no comenzó de la mejor manera pero terminó acorde a las expectativas que genera un equipo con tales condiciones. El tercer puesto logrado con seis puntos de diferencia sobre el cuarto lugar fue una muestra de coraje y enorme valor para un conjunto que se sobrepuso a la ausencia de varios jugadores y se ató a una esperanza, a una ilusión, a una utopía, para encarar toda la segunda rueda del torneo.

Un equipo que se preparó para pelear por el ascenso pero que quedó fuera de la lucha mucho antes de lo pensado. Las primeras cinco fechas fueron fatídicas y casi que dejaron a Estrella jugando por el honor todo el resto del campeonato. Un punto sobre doce posibles (la segunda jornada la tuvo libre) alejó a la primera división de los primeros puestos desde el arranque del año. A esa altura, Estrella ya había perdido todos los partidos posibles que requiere una campaña de ascenso y no tenía margen de error con 27 fechas por jugarse. Sus rivales ya habían tomado ventaja sobre el conjunto de Boedo: Barracas Central ya tenía 15 puntos y Newbery 12.

A pesar de los números del comienzo, vale destacar la recuperación que tuvo el equipo en el inicio de la segunda rueda, donde Estrella forjó su mejor racha invicto alcanzando la cantidad de nueve partidos sin perder (siete ganados y dos empatados). Y, además, sólo perdió dos partidos a lo largo de las últimas 16 fechas. Otro dato que no es menor es que desde la incorporación a los torneos AFA en el 2006, esta fue la segunda mejor temporada de Estrella sólo por detrás de lo realizado en aquel año del debut donde alcanzó las semifinales. 

El equipo dirigido por Diego Fenelli no sólo fue el más goleador de su zona sino que también lo fue de toda la segunda división con 204 goles a favor (promedio de seis goles por partido). Sus seguidores en este rubro justamente son los dos conjuntos que terminaron por encima: lejos de Estrella, Barracas Central hizo 191 y Newbery 180. Pero, en contra posición con los goles a favor, también fue elevada la cantidad de tantos que recibió: fueron 145 a lo largo de las 32 fechas disputadas.

Un nuevo año se termina con el sabor amargo de haberse quedado otra vez en la puerta a pesar de los diez puntos de diferencia con el segundo puesto. Otra vez queda la sensación de haber jugado de igual a igual contra los equipos de arriba sin tener nada que envidiarles. Habrá que hacer borrón y cuenta nueva para, a partir de la noche del 31, volver a soñar con el ascenso.